(del griego abyssos, sin fondo). Término con que la LXX traduce la palabra hebrea que denota océano inicial (Gén_1:2), aguas abismales (Sal_42:8) y mundo de los muertos (Sal_71:20).
En el Antiguo Testamento expresa el concepto antiguo del océano, una vasta masa de agua sobre la que flotaba el mundo (Gén_1:2; Gén_7:11) y alude a un elemento del caos primitivo (Job_28:14).
En el Nuevo Testamento se presenta como morada o calabozo de los demonios (Luc_8:31; Apo_9:1ss; Apo_11:7; Apo_17:8; Apo_20:1-3) y lugar de los muertos (Rom_10:7; [Ver=] SEOL).
No hay comentarios:
Publicar un comentario